En educación sistémica, se dice que es conociendo las relaciones pasadas, que puedes comprender mejor las que tienes ahora. Y así sucede con las emociones, los roles, etc, en definitiva, con las dinámicas personales y sociales que generamos. La herramienta del árbol genealógico nos da mucho contenido desde donde podemos trabajar para conocer nuestros orígenes y entender mejor quienes somos y definir hacia dónde vamos.